En mi vida llena de aciertos y errores, un día, en una vuelta del
camino encontré a alguien que influyó en mi, me inspiró positivamente y de
buena manera, me ayudó a cambiar unos grados, minutos tal vez, el curso de mi
vida y como ese cambio ha sido significativo y perdurable me llevó a la larga a
un destino muy diferente del que tenía planeado anteriormente.
Sin pretender cambiar a nadie, esas personas actuando sin
intensión lograron cosas fantásticas, memorables y profundas.
No es necesario cruzarse a Zaratustra para que esto ocurra, basta
esa actitud movilizadora y ya está hecho, hoy estoy aquí agradeciendo a todos
aquellos con los he contactado en los últimos 12 meses, a los que he tenido la
oportunidad de abrazar, a los que han compartido una porción del recorrido y a
los en instante solo cruzamos una mirada, los que han estado cerca mío y los
que no.
Muchas gracias 2103 por esta alucínante experiencia.
De corazón, Toni
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